LIBRES PARA ACTUAR Lc 5, 33-39
LIBRES PARA ACTUAR
Lc 5, 33-39
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Luis Fernando Castro Parra TEÓLOGO |
¿Estamos abiertos a la novedad en nuestra experiencia de vida, rompiendo con las cosas viejas y ya superadas? A la luz de la Palabra de Dios, Jesús enfrenta una discusión con las autoridades religiosas de la época, entorno a la práctica del ayuno: El ayuno es una costumbre muy antigua, practicada por casi todas las religiones. Jesús mismo lo practicó durante cuarenta días. Pero él no insiste con los discípulos para que hagan lo mismo. Les deja la libertad de actuar. Tal vez en nuestra experiencia de vida familiar, social y religiosa hemos aprendido y practicado algunas actividades que se han convertido en rutinas y en costumbres obligatorias, prácticas que son importantes, pero no determinantes para nuestra vida de hoy. Sin embargo, algunos puestos en pie de batalla defienden e insisten en actuar en sus esquemas viejos, en poner en práctica sus aprendizajes y sus costumbres pasadas y, aunque son conscientes de los retos que causa la novedad prefieren encasillar y reducir lo nuevo al tamaño de lo viejo, impidiendo avanzar y actuar con verdadera y responsable libertad, incluso se dedican a levantar críticas destructivas a quienes deciden continuar hacia adelante. Por supuesto que no estamos en contra de lo viejo, pero sí es interesante saber que el pasado o las costumbres antiguas no pueden imponerse a lo nuevo, como tampoco pueden determinar nuestras decisiones y acciones. Sería como pretender reducir todo un movimiento tecnológico actual a un telégrafo. El diseño de lo nuevo hace estallar lo viejo. Hoy es mejor que ayer. Y mañana será mejor que lo vivido hoy. Somos libres para actuar en el momento adecuado y oportuno, con apertura a lo nuevo, a lo que es atractivo, a lo que nos conduce a aprender y a descubrir un sentido vivo de la vida que nos realiza. Claro, lo viejo fue bueno, pero lo nuevo es mejor. Nadie querrá volver y quedarse en el pasado si tiene un futuro prometedor. La novedad es una cualidad que nuestra vida trae cada día. Cada momento de existencia es un nuevo año de gracia para disfrutar, para servir con dinamismo. Cada día es nuevo y diferente, tiene la posibilidad de encontrarnos con un pan fresco, con un diseño diferente. No todo es lo mismo. Hay nuevas oportunidades, nuevos paradigmas por aprender. Eso es lo que nos hace libres y nos ayuda a actuar con responsabilidad. Las decisiones y las acciones que hoy tomamos son una oportunidad para dar una nueva forma a nuestra vida y también para las demás personas. No podemos quedarnos como un manto lleno de parches, llenos de diseños y de costumbres que no dejan avanzar, que estancan y que provocan solamente nostalgia. Por tanto, es sorprendente dejarse asombrar por lo que nos facilita crecer, por lo que nos hace verdaderamente libres y felices, por lo que nos hace lograr mayores y mejores resultados en todos los aspectos de nuestra vida. O como dice un proverbio popular: "los perros ladran, pero la caravana sigue hacia adelante". Que nunca nos falten los motivos para continuar hacia adelante. La vida no se ha terminado. Hay algo más por conocer e ir más lejos.
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