CREANDO UNA NUEVA FAMILIA Mt 12, 46-50
CREANDO UNA NUEVA FAMILIA
Mt 12, 46-50
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Luis Fernando Castro Parra TEÓLOGO |
¿De qué modo podemos en nuestra experiencia de vida comprender el sentido de familia? A la luz de la Palabra de Dios, Jesús amplía el significado de madre y hermanos, implicando el amor a muchas personas bajo una sola forma de comprender la fraternidad y la maternidad. Cuando nos referimos a hablar del concepto de familia, lo más común es pensar en aquellos con quienes nos amamos, compartimos distintas experiencias, convivimos y nos relacionamos bajo un techo. Sin embargo, a pesar de haber nacido en un ámbito familiar donde cada uno de las personas que hacemos parte de este hogar nos apoyamos, nos solidarizamos unos con otros, aprendemos a socializar y a relacionarnos en el amor y en el perdón, creando propuestas y proyectos para desarrollar, no hemos sido creados simplemente para ocuparnos y hacer parte de nuestra pequeña familia, olvidando al resto del mundo. Y, aunque nos puede causar asombro o choque esto, es preciso que todos y cada uno de nosotros como personas, descubramos lo maravilloso de compartir la vida y la fraternidad con otras personas con las que podemos entrar en contacto, ayudar, acompañar, aprender, compartir en sus distintas condiciones, hacerlos sentir que hacen parte de una familia en la que no están solos, venciendo así todas aquellas actitudes y modos de vida que separan, que dividen y que excluyen para crear nuevas relaciones de amistad, que se aportan y crecen de una manera integral sin mirar los estratos y las posiciones o cargos adquiridos en su experiencia de vida. Esto facilita que las familias no se encierren en sí mismas sino que desarrollen en su proyecto un estilo de vida que abrigue y que acoja a otros como si hicieran parte de su pequeña familia, para acompañarlos y apoyarlos en el crecimiento de su vida, aunque esto implique incomodidades, desprendimientos y pequeños sacrificios significativos. De manera, que tener una nueva familia implica apertura hacia los demás, descubriendo en estas personas la oportunidad para amar y construir una mejor calidad de vida donde todos podamos gozar de ser libres y felices como padres, como madres y como hermanos.
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